El 'método Asti' se puede considerar como una variación del 'Método Tank' (haga clic aquí para leer más detalles sobre el 'método del tanque') en la elaboración de vinos espumosos.
La principal diferencia entre ambos es que en el 'método Asti' el mosto base se somete a una única fermentación (mientras que en el 'método Tank' el mosto se somete a dos fermentaciones distintas).
Por lo tanto, el CO2 que da la burbuja final dentro del vino final solo proviene del azúcar del mosto original (y no de ningún azúcar adicional).
Durante esta fermentación alcohólica única (transformación del azúcar en alcohol y CO2), el dióxido de carbono (CO2) se escapa a través de una válvula en el tanque presurizado. Luego, esta válvula se cierra para retener el CO2 en el tanque y forzar su integración en el vino en fermentación (para crear las burbujas en el vino terminado). Esta es la razón por la cual los vinos Asti tienen generalmente una presión más baja que otros vinos espumosos.
Finalmente, cuando el vino alcanza el nivel deseado de azúcar (alcohol), el vino se enfría y se filtra rápidamente. En este punto, o bien el vino se embotella directamente para su venta o bien se mantiene refrigerado durante varios meses listo para ser embotellado bajo demanda con el fin de ofrecer al cliente final un vino acabado lo más afrutado y fresco posible.
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